jueves, 31 de marzo de 2011

The Story





All of these lines across my face
Tell you the story of who I am
So many stories of where I've been
And how I got to where I am
But these stories don't mean anything
When you've got no one to tell them to
It's true... I was made for you

I climbed across the mountain tops
Swam all across the ocean blue
I crossed all the lines and I broke all the rules
But baby I broke them all for you
Because even when I was flat broke
You made me feel like a million bucks
You do
I was made for you

You see the smile that's on my mouth
It's hiding the words that don't come out
And all of my friends who think that I'm blessed
They don't know my head is a mess
No, they don't know who I really am
And they don't know what
I've been through like you do
And I was made for you...

All of these lines across my face
Tell you the story of who I am
So many stories of where I've been
And how I got to where I am
But these stories don't mean anything
When you've got no one to tell them to
It's true... I was made for you

miércoles, 23 de marzo de 2011

Tregua conmigo mismo.

Hoy fue uno de esos días donde alguien dio un duro acicate a mi persona, de esos que te ponen analizarte a consciencia y que te impactan.
En mi caso, ese golpe entró muy dentro, penetrando capa por capa de todo lo que había formado y llevándome a un enorme flashback al pasado. A la época donde todo comenzó a cambiar.
Mi yo anterior se confrontó a mi yo actual. Dialogaron, discutieron y se gritaron de una manera que aún estoy asimilando. Es sorprendente cuanto cambio he tenido en este tiempo. Muchos para bien, algunos pocos para mal.
Creo que lo que más difícil era para mi es el perdón. No hacia los demás, sino hacia mí mismo. Una tregua entre los dos.
Mi yo anterior, Eduardo, blasfemaba en contra de mi yo actual. Abandonar toda aquella vida "social" que tenía donde sólo ahí se sentía parte de un todo fue un cambio drástico. Esa parte de mi siempre maldecía mi nuevo yo, un lobo "solitario" que no busca desesperadamente la aceptación de los demás, que le basta con los seres que le rodean y que se interesan por quien es, no por lo que aparenta.
El yo actual, Goethe, ya no busca combinar ropa, peinarse a la moda, o tener que cumplir el código de vestimenta que los demás imponían. Goethe se siente cómodo con unos jeans y sus playeras favoritas, esas que no tienen que ver con marcas, con estar "fashion" y etiquetado. Me pongo lo que tengo y lo que quiero, colorido o seco. Eduardo era todo lo contrario.
Goethe acepta la diversidad de mentes que están a su alrededor. Consciente de la superficialidad que muchas veces encuentra en su haber diario, y del cansansio que ha dejado en los demás. Ha aprendido a tomar la vida como es y a dejar camino libre a los demás, poco a poco, aún cuando Eduardo quiere a veces actuar. Ya no necesito poner esa máscara de aprobación ante cosas con las que no comulgo sólo por mantener un ambiente relajado, aunque eso causara un conflicto moral en mi interior. No todo se puede controlar, ni puedes ayudar a arreglarlo. Dura lección.

Goethe y Eduardo están en paz, se han aceptado. Uno no es el otro. Sin embargo, se entienden. y se aceptan. Se perdonan. Me perdono.

Estoy en paz. Gracias por ese golpe de hoy, D.

sábado, 12 de marzo de 2011

Agosto es la fecha, el dinosaurio llega...

SOY MUY FELIZ!!!!!


miércoles, 9 de marzo de 2011

Colbie llena mis oidos mientras me encuentro escribiendo esto. Sí, me encuentro melancólico, y deseando.
Deseaba encontrar un lugar a donde pertenecer, dentro de alguien, en cierto sentido a su tiempo y que se acoplara a las características de vida de ambos... Alguien con quién compartir.
Por lo menos, eso quería pensar, realmente lo que quería era estar con C., nuevamente.
Sí, parte de mí lo sigue esperando, aún sabiendo lo que muchas personas piensan, y parte de mí está consciente de que ya no es la misma persona, y que es imposible traerlo de vuelta. Pero ustedes saben, a veces uno la caga de manera épica y se encuentra con el arrepentimiento cada día. Pero de esto aprendemos.
Ayer, A. me llamó, después de más de un mes en el que pasó cierta situación excitantemente extraña entre nosotros, y tras la cual tuvimos una seria charla, a través de la cual asentamos las cosas tal cual eran y llegamos a una especie de pacto. El podría buscarme con "papelito en mano".
Pues bien, ayer vino con el mentado "papelito", firmado, entregado y todo. Era hombre libre, y venía dispuesto a ver qué pedo. y yo no sé ni qué pedo...
Hace 5 años, cuando anduvimos, hubo mucho sentimiento, pero también muchas cosas no agradables. Si bien entonces yo no me consideraba "fuera del closet", A. se encontraba en una caja fuerte, y sigue ahí. Nuestro mundo se centraba en recorrer la ciudad en su automovil y su departamento. No salidas, no comidas, no amigos, no nada. Alguien que se aferraba a vivir en secreto aquello que consideraba (y considera) como suyo y de unos pocos más. Cosas que no comprendía y aceptaba, pero que ahora, curiosamente, causan lo contrario.
Hay reglas que se deberán acatar, por parte de ambos, nos conocemos muy bien para andar con el jueguito de la conquista y todo el pedo, conoce mis secretos y conoce lo que siento, conozco sus miedos y sus aversiones.
Al final, creo que una triste y perra característica nos une. ¿bastará?



martes, 8 de marzo de 2011

Algún día tu y yo tendremos esa charla, que hemos dejado guardada, como adultos que somos...
Algún día...