domingo, 21 de junio de 2009

Entre días del padre y sentimientos encontrados.

Nunca he celebrado el día del padre. Aunque hace algunos años mis hermanas comenzaron la tradición de realizarlo, jamás me involucré debidamente ya que me había prometido no olvidar aquellos años que mi padre no recordaba mi cumpleaños.

Este año, el sentimiento fue peor. Con todo lo que esta pasando en casa, ni ganas tenía de "Celebrar" el hecho de tener el padre que me tocó. La mezcla de pensamientos y sentimientos, el hecho de quererlo aún y repudiarlo por la forma en la que está haciendo las cosas me causo un estado de repeler todo lo que significa este día.

Quería estar con mi mamá todo el día, pegado a ella. Sin embargo, ella escapo dejandome arrinconado. Mi padre me pidió que celebrara con él y mis hermanas. Yo, con la excusa de la falta de dinero, traté de deslindarme de aquello. Sin embargo, el dijo que no importaba, que el pagaría todo lo mío con tal de estar conmigo. De mala gana acepté.

Y salimos juntos. Comimos juntos. Ellos rieron mientras yo fingía sentirme cómodo con la situación. De regreso el puso un disco el cuál grabó con canciones de desamor. Me daban ganas de sacarlo del estéreo y aventarlo por la ventana, porque sé lo que significan esas canciones para él.

Llegamos a casa. Busqué a mi madre y le dije que yo hubiera querido estar toda la tarde con ella. Me dijo que ese día necesitaba pasarlo con mi padre... "Es el día del padre". Salí y ella me siguió. Me preguntó si había comprado algo especial para él. Secamente, le respondí que no, mientras en mi mente pasaban todas las razones por las cuales no merecía nada. Ella, con sus ojos tristes, me dijo que en "X" lugar de la casa había escondido un regalo para él, y que yo tenía que darselo como si lo hubiera comprado. Traté de negarme, pero ella insistió. Le dije que lo haría, pero no encontré el momento ni la emoción adecuada ni ficticia. No tenía ganas.

Y me encerré en mi cuarto. Y mi mente se desbordó. Busqué como loco aquel negativo de foto que tengo como único recuerdo de aquella pequeñita con la cual perdí contacto. Lo contemplé por horas, gracias al artefacto de plástico en el que me la entregaron aquella tarde que fuimos al circo, hace ya varios años atrás.

Supongo que ahora es consciente del mundo que sucede a su alrededor. 5 años o 6?... lo he olvidado. No puedo recordarlo con precisión. Es una parte de mí que he decidido enterrar. Después de todo ya no hay motivo para pensar en ella más que de vez en cuando.

Estarás contenta?, habrás celebrado con aquel que es tu "papá"?.

El recuerdo más grande que tengo de tí es el hecho de haberte nombrado. Un nombre extraño para los apellidos de tu madre. Un nombre que quizá no sonaba bien, excepto cuando tu madre decidió complementarlo con el nombre de las mujeres de su familia. Sin embargo, ese nombre extraño perdurará en tí. El nombre de una de mis brujas favoritas. Aquella hechicera de esa historia que me envolvió. Aquel nombre celtico que envuelve el significado de tu gran existencia... mujer...

Así que me quedo con ese recuerdo esta noche. Probablemente soñaré contigo. Probablemente ni recuerdes mi nombre, y probablemente ni tu madre te haya mencionado mi existencia otra vez.

Quizá en este sentido me sienta como mi padre, queriendo ser recordado y celebrado. El siempre estará en mi mente, a pesar de todo lo malo. Despues de todo, es mi padre, aún sintiendo lo que siento ahorita. Sin él no estaría aqui, ni tú...

2 comentarios:

Angry Kitten dijo...

Eres parte de ella y biològicamente siempre te llevarà consigo... Ademàs de uno de los nombres màs bonitos que alguien le puede dar a una hija.

Mon amour, sobre nuestros padres las personas que pensamos siempre tendremos sentimientos encontrados, solo los imbèciles o los hipòcritas celebran lo que se supone sea un padre o una madre ideal.

El punto como bien dices al final es que sin èl no estarìas aqui.. suficiente para agradecerle, no lo crees?

Os amo!

Jourge dijo...

Ay cabrón...

Me estoy imaginando un buen de cosas...

Aun no he visto esa temporada!
:O